La imagen de la bailarina con la falda de tul blanco ha sido fuente de inspiración para miles de diseñadores que han utilizado el tul para sus faldas. La verdad es que este tejido permite tener faldas muy elegantes, con largos muy apropiados y con una belleza indiscutible.
Ahora bien, la nueva tendencia pasa por añadir colores: rojo, rosa, azul… y también por rebajar capas de tul para perder «pomposidad» y ganar en sencillez, permitiendo que la falda de tul se convierta en algo más llevadero, más del día al día.
Esta temporada nosotras hemos apostado por colores como el amarillo, el azul o un frambuesa muy original en las faldas más sencillas y por mantener el gris, rosa o blanco, típicos de las faldas de tul en aquellas faldas con más capas.
Nos ha sorprendido mucho el éxito de una maxi falda en negro de tul, que ha sido una de las faldas más comentadas, con más «me gusta» y que más feedbacks favorables hemos recibido. Esta falda, la verdad es que va muy marcada a eventos sociales o para fechas especiales.
Lo que está claro es que el tul vuelve con fuerza, y lo hace en diversos colores y con diversos acabados. Si nunca te has atrevido con una de estas faldas… vete haciendo hueco en el armario porque dentro de poco se habrá convertido en un básico.
